CONOCE UN POCO SOBRE EL CLÍMAX Y COMO ESCRIBIRLO
Te apuesto a que has eschuchado mucho sobre la palabra ‘clímax’ en diferentes contextos. Sin embargo, el día de hoy, vamos a aprender un poco de la función que cumple en una historia, en qué lugar se encuentra y cómo puedes escribirlo.
¿Preparado? Acá vamos:
Normalmente cuando hablamos de las partes de una historia, mencionamos, de manera general, la secuencia inicio-nudo-clímax-final. Aunque es una forma muy por encima de analizar una historia -yo prefiero verla de esta forma o de esta otra-, te darás cuenta que el clímax es una de las partes más importantes ya que, entre otras cosas, antecede al final: esto quiere decir que el clímax de una historia debe tener a los espectadores al borde de la silla.
Si has hecho un buen trabajo, para el momento en que empieza el clímax tus lectores deberían tener una idea general de lo que está por suceder: el enfrentamiento entre tu protagonista y tu antagonista, o cualquiera que sea la fuerza que se le oponga a tu personaje principal -que podría ser alguna de estas-, y que además es invitable. Al mismo tiempo deberían estar sufriendo la tortura exquisita de no saber con certeza los que se les viene encima, ¿quién quita que nuestro amado personaje principal, con quien nos hemos encariñado a lo largo de la historia y con quien hemos vivido tantas cosas, termine muriendo? -lo que, acá entre nosotros, es una de las 6 formas de hacer más traumática la muerte de un personaje, como puedes leer en este artículo.
Por estas dos razones, se puede considerar como un momento de gran tensión. Estos 6 consejos te ayudarán a conocer como escribir este momento importante, ya que enseñan a agregar tensión a tu historia y además son muy sencillos para aplicar.
En general, todo el tercer acto hace parte del clímax. Desde el final del segundo acto la acción debe aumentar: el personaje debe estar entre la espada y la pared y no tiene más opción que luchar. Cuando empieza el tercer acto, las dos fuerzas opuestas colisionan finalmente en una escena inolvidable.
Recuerda que los dos bandos deben estar nivelados para ese momento: del resultado de este encuentro se determinará quien consigue sus metas y quien será el derrotado que deberá volver a empezar. Ambos tienen lo mismo que perder y lo mismo que ganar.
En muchas historias el clímax involucra una batalla física, en otras, no será otra cosa que un descubrimiento interno y un cambio de actitud: algo que transforma todo para el protagonista. Lo cierto es que, sin importar como se lleve a cabo, casi siempre se presenta un momento de revelación conocido como punto crucial.
Dependiendo las necesidades de la historia, el personaje principal experimentará esa epifanía un momento antes, durante, o justo al terminar la escena y actuará de acuerdo a lo que haya aprendido en ese momento. De esta manera disparará el cambio en su arco y terminará el conflicto principal.
Como el clímax ocurre cerca al final del tercer acto, es común que sea la penúltima escena: no hay necesidad de que la historia continúe mucho después de eso, ya que para entonces se habrá dicho todo lo que se necesitaba decir.
Esperamos que con este artículo hayas aprendido un poco más sobre el clímax de tu historia. Si te sirvió la información, alegra nuestro día con un ‘like’. No olvides seguirnos en redes sociales para tener más consejos de escritura y ayudas para escritores.
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Imagen: El coleccionista de instantes (vía flickr)