Desarrolla a los personajes de tu historia

5 COMPORTAMIENTOS IRREALES QUE, SIN QUERER, ESTÁS PONIENDO EN TUS PERSONAJES

En este tiempo que he ayudado a otras personas con sus manuscritos, me he encontrado con todo tipo de errores o falencias en el desarrollo de sus obras o en la caracterización de sus personajes.

Todos cometemos errores, eso es verdad y más cuando estamos empezando. Por eso, hoy vengo a contarte sobre algunos de los problemas más comunes que he detectado relacionados con la caracterización y el comportamiento de los personajes. Algunos de ellos los puedes solucionar fácilmente y otros los deberías evitar a toda costa. Lo importante es conocerlos para así poderlos solucionar a tiempo ya que de no hacerlo pueden terminar afectando tu trama, la credibilidad de tu personaje o la conexión con el lector.

Problemas comunes en la caracterización de tus personajes

1- Castidad inexplicable

¿Cómo es posible que un personaje sobrenatural que ha vivido más de 100 años no haya dado un solo beso en su vida antes de conocer a la protagonista? Es muy fácil encontrar este tipo de características en los romances, pero muchas veces estas características van más allá de solo este género.

Hay muchos escritores que son conservadores y no quieren que sus personajes tengan ningún tipo de tentación anterior al personaje con el que se van a involucrar en la historia. Está bien, pero es importante no minimizar sus impulsos biológicos. Si no quieres que tus personajes tengan sexo, entonces no los dejes solos en una misma habitación o da una razón creíble a por qué se resisten a hacerlo.

El otro lado de la moneda son aquellos personajes con libidos tan fuertes que terminan en escenas sexuales poco realistas.

2- Anomalía cultural

A veces los escritores queremos que nuestros personajes sobresalgan al resto de las personas que los rodean. Una forma muy fácil de hacerlo es desarrollando la historia en una cultura que consideras inferior de alguna manera —especialmente por razones morales— y luego mostrar al protagonista como la oveja negra de la sociedad.

En el peor de los casos, las anomalías culturales terminan sirviendo para expresar racismo, así se trate de un mundo ficticio o una cultura ficticia.

Si lo que quieres es que tu personaje tenga valores diferentes de quienes le rodean, entonces da una explicación para eso. La mejor opción que tienes es darle experiencias diferentes a los demás: dale un mentor disidente, un pasado inusual o un momento en su vida que le hizo cambiar su forma de ver el mundo.

3- Las dificultades no lo afectan

Trasfondos en los que los personajes han tenido que superar dificultades pasadas son atractivos y realistas. El problema está cuando este tipo de situaciones pasan por encima del personaje y no lo afectan o cambian en nada. Normalmente una situación traumática tiene efectos negativos en la personalidad.

Los personajes pueden superar sus tragedias pasadas, claro está, pero el lector debe verlo enfrentándose a sus demonios. Si no lo haces, estás demeritando el daño que causa un evento traumático.

4- Aprende más rápido que cualquiera

Es verdad que quieres que tu personaje crezca a lo largo de la historia. Que pase de ser alguien débil a alguien que pueda superar las adversidades y enfrentarse al villano de turno. Para eso requieres darle un largo tiempo de preparación que incluso pueden volverse años. ¿Pero qué pasa cuando tu historia se desarrolla solo en unos cuantos días? Necesitas crear una explicación razonable, porque la gente real no crece ni se desarrolla tan rápido.

Aunque es ciencia ficción, en Matrix tienes un buen ejemplo de este desarrollo. Podrías echarle un ojo y adaptarlo a tu obra. Otra opción que tienes es mostrar esa debilidad particular que hace que tu personaje no pueda avanzar en su aprendizaje y luego crear una escena en la que le enseñes cómo superarla.

5- Ignorancia ilógica

Es verdad que explicar nuestro mundo, especialmente cuando es totalmente creado por nosotros, es un poco difícil. Tener un protagonista ignorante le permite al escritor explicarlo todo a través de él. Pero, a menos que este protagonista haya sido recién importado desde otra dimensión, debería saber al menos, las reglas básicas del mundo en el que ha vivido toda su vida.

Una alternativa para este problema es que tu personaje tenga mal algunos conceptos o crea en falsos rumores y su mentor tenga que enseñárselos o los deba aprender a las malas, cometiendo errores.

Para finalizar, la mejor manera de evitar estos comportamientos irreales es investigar cómo la gente reacciona en situaciones similares. Si una persona que estuvo toda su adolescencia encerrada en el ático tiene ciertos problemas, pues tu personaje que vivió siempre en una torre también los tendrá. Entre más se diferencie su comportamiento al de una persona normal, entonces más tendrás que enfocarte en explicarlo.


Cuéntanos qué opinas sobre el artículo en los comentarios y si nos faltó algo, ayúdanos a completarlo. ¡Nos encanta leer tus anécdotas!

Esperamos que este texto te sirva para que no cometas esos errores en tus obras. Si te sirvió la información, alegra nuestro día con un ‘like’. No olvides seguirnos en redes sociales para tener más consejos de escritura y ayudas para escritores. Estamos como escritoresmnemosine.

En Facebook puedes reírte un rato con nuestros memes, en Instagram hablarnos de tu obra y unirte a nuestros retos diarios y en Youtube disfrutar de los videos que hemos hecho especialmente para ti.

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *