Tal vez, mientras trabajabas en tus obras te diste cuenta que editar es lo que más te gusta hacer y quieres seguir por esa línea de trabajo. Empezar una carrera como un editor ‘freelance’ es relativamente fácil, ya que no necesitas invertir en software costoso o equipos.

Sin embargo, existen dos requisitos para este oficio: 1) Conocimiento de la lengua y una gracia natural con el discurso racional y creativo escrito; 2) Precisión con las palabras y un buen sentido de la estructura y de la narrativa.

También necesitarás algo de habilidades diplomáticas porque los editores trabajan con todo tipo de personas con diferentes metas editoriales en la cabeza.

Aun así, las habilidades técnicas y creativas no son suficientes. Ser independiente es un negocio después de todo. Por lo que los consejos que te voy a dar en este artículo van a estar divididos en tres secciones.

¿Qué necesitas para volverte un editor ‘freelance’?

1- La experiencia

a) Haz que tu experiencia cuente

Antes de lanzarte a la edición ‘freelance’ debes tener algo de experiencia en los servicios que estás tratando de vender. No puedes decir que eres un editor de ficción hasta que no tengas algunas novelas y cuentos en tu catalogo como editor.

Échale un buen vistazo a tu experiencia en las letras y mira si de ahí puedes sacar algo que sirva como experiencia editorial tangible.

b) Edita sobre lo que conoces y empieza en un nicho

«Escribe sobre lo que sabes» es un consejo tan popular que a veces parece cliché. Sin embargo, en esta ocasión es bastante necesario. Yo te diría: «edita sobre lo que consumes». Si bien, puedes ser un editor de ficción, no quiere decir que debas editar cuanta obra de ficción se te pasa por las narices.

Si eres un amante de la ciencia ficción o de las novelas policíacas, lo mejor es que empieces por ahí.

No solo es por la familiaridad en términos o temas que te permitirá aconsejar mejor a tu cliente, también es por el hecho de que al quedarte en un nicho empiezas a crear una red de conocidos a tu alrededor que te reconocerán fácilmente por tu trabajo. Al enfocarte y volverte experto en un solo tema, las personas de tu nicho empezarán a buscarte a ti y hasta te pagarán un poco más que al promedio.

Reinventarte a ti mismo y convertirte en un editor toma tiempo. Una vez ya logras estabilizar tu carrera ‘freelance’, puedes darte el gusto de cambiar de géneros y formatos de vez en cuando.

2- Los clientes

a) Descubre qué es lo que tu cliente necesita en verdad

Si un cliente llega a ti buscando únicamente una revisión ortotipográfica pero al enfrentarte al texto descubres que tiene problemas en su desarrollo o en su contenido, déjale saber eso y aconséjale hacer una edición más profunda. Es posible que el cliente tenga una historia brillante, pero para transmitirla necesitará más que corregir unos puntos, unas comas y una que otra tilde.

Éstas son algunas preguntas que puedes hacerle a tu cliente para ayudarle a que tome el servicio más acorde con sus necesidades:

-¿Necesitas ayuda para crear una trama, saber por dónde empezar a investigar o mantenerte motivado mientras escribes? Si es así, necesitas una edición de desarrollo.

-¿Te sientes seguro con tu trama, concepto y la habilidad de mantenerte motivado mientras escribes pero necesitas ayuda en el tono, en el ritmo, en las escenas o en el desarrollo de la obra en general? Si es así, necesitas una edición de contenido.

-¿Te sientes bien con tu manuscrito y lo que quieres es una buena revisión de sintaxis, puntuación y otros posibles errores ortotipográficos? Necesitas una edición ortotipográfica.

-¿Tu manuscrito ya ha pasado por todas las revisiones anteriores y solo quieres asegurarte de que no haya ningún error que se te haya escapado? Necesitas un lector beta.

Al presentarle a tu cliente estas opciones, además de iluminarlo respecto a las complejidades le demuestras el verdadero valor del proceso de edición —un editor no es solo un corrector ortográfico humano.

b) Dale opciones

Dale a tus clientes varias opciones o paquetes que mejoren el servicio que le vas a prestar. Por ejemplo:

-El paquete 1 se trata de una lectura beta; la opción dos incluye la lectura beta y la corrección ortotipográfica; y la opción 3, además de las anteriores, incluye una edición de contenido.

Muéstrale como cada opción mejorará la calidad de la obra. Tu meta es lograr que tu cliente te compre el paquete de todo en uno.

c) Establece los términos y condiciones

Se claro todo el tiempo con tu cliente y desde el primer momento cuéntale cuánto tiempo te vas a demorar, si hay una sola fecha de entrega o si el trabajo va a ser entregado por partes. Si es así, cada cuanto le vas a actualizar el proceso. También cómo va a ser todo lo referente al pago para que no tengas que gastar mucho tiempo persiguiéndolo para cobrar.

d) Se estratégico con los precios

También debes aprender cómo negociar tus tarifas con los clientes.

Resiste la necesidad de competir por precios o de entrar en el juego del regateo. En vez de eso ponle precio a tus servicios de tal forma que puedas conseguir una base de clientes que te permita sostenerte y a quienes les ofrezcas algún tipo de valor o diferencial de mercado.

e) Haz seguimiento

Eres independiente por lo tanto es muy importante que seas ordenado y cuidadoso con tus clientes y documentos. Abre una carpeta para cada cliente y guarda ahí todos los contratos, correos, propuestas o copias del trabajo. Establece un sistema que te ayude a disminuir la cantidad de tiempo que puedes perder con el papeleo.

f) Crea una base de datos que permita recompra

Buscar clientes nuevos es un proceso largo que toma tiempo y esfuerzo. Si logras mantener una buena relación con tus clientes ellos pueden volver a ti con su siguiente proyecto y además pueden recomendarte con sus conocidos. No pierdas el contacto con tus clientes antiguos. Una buena base de datos y una estrategia de ‘email marketing’ te ayudarán a estar presente en sus mentes y a contarles sobre los nuevos servicios que ofreces o las promociones que estás haciendo.

3- Promociona tus servicios editoriales

a) Aprende cómo atraer clientes potenciales

Cuando envíes tus propuestas a los clientes, deja en claro qué es lo que tus servicios pueden hacer por ellos y sus proyectos. No digas únicamente que puedes embellecer sus obras, sino cómo. Todos los editores embellecen las obras, pero ¿qué es lo que te hace diferente a ti?

Muéstrate como la solución ideal para tu cliente resaltando aquello que te diferencia del resto de editores —puede ser tu nicho, por ejemplo— y cómo esa diferencia es justo lo que él o ella necesita.

b) Crea tu marca

Si ya has leído otros artículos del blog o asistido a alguna de nuestras clases, sabrás lo insistentes que podemos ser con aquello de la marca de autor. En este caso no te puedes salvar, pues te hablaremos de la marca de editor.

Es importante que trabajes en tu presencia en línea para crear una comunidad a tu alrededor que te permita llegar a más clientes. Una buena página web será indispensable para dar una imagen más profesional.

¿Qué necesitas para crear tu marca de editor?

– Página web fácil de navegar: Haz que tu página se vea siempre elegante y limpia pues es la imagen que le estás proyectando a tus clientes. Busca plantillas que reflejen lo que quieres construir con tu marca y no olvides incluir tu portafolio en ella.

-Se fiel a tu marca: Los colores, las letras y el diseño del logo son importantes porque son usualmente la primera impresión que se lleva el cliente de ti, por lo que es importante que seas consistente. Usa la misma imagen, el mismo nombre y el mismo discurso en todas tus redes y en tu página web, de esa manera tus clientes te identificarán más fácilmente.

-La estrategia de contenidos es importante: Tanto los contenidos que subas a tu blog como los que compartas en tus redes sociales hablan de ti. Así que toma tu tiempo y planifícala lo mejor que puedas. Recuerda que siempre debes mantener una imagen profesional y en lo posible demostrar tus conocimientos del oficio y del nicho al que perteneces.

-Actualiza seguido tus redes sociales: Las redes sociales te permiten tener un dialogo constante con tus potenciales clientes, por lo que es importante que no las dejes de lado y estés lo más activo que puedas ellas —sin descuidar el trabajo de edición—. Recuerda que tú eres el rostro de tu propia marca, por lo que mantén una imagen profesional siempre.

c) Haz posts como invitado o ‘guest posting’

Los editores no solo se dedican a editar, también tienen que saber escribir. Un poco de práctica,  desarrollando temas que te interesen, siempre está bien. Ya sé que este tipo de textos no te pagaran las cuentas, pues la mayoría de ellos se hacen de manera gratuita, sin embrago, te ayudarán a construir un portafolio, darte a conocer y posicionarte como experto.

 No olvides incluir tus redes sociales y tu página web para que tus clientes potenciales te puedan encontrar con más facilidad.

e) Mantente informado

Mantente informado de las noticias y lo que sucede en la industria, lo que además sirve como buen material para tus blogs o redes sociales. Cura el contenido y muéstrate a ti mismo como una autoridad en el tema.

f) Sé selectivo

Un negocio de edición ‘freelance’ rentable empieza con tu pasión y creatividad, pero sobrevive a largo plazo con tu perspicacia editorial. No cometas el error de empezar a editar absolutamente todo lo que te salga, se selectivo con tus proyectos y crea una marca personal a partir de ellos.

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Esperamos que este texto te sirva para que puedas empezar como editor ‘freelance’. Si te sirvió la información, alegra nuestro día con un ‘like’. No olvides seguirnos en redes sociales para tener más consejos de escritura y ayudas para escritores. Estamos como escritoresmnemosine.

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